Respuesta. Al considerar lo que podría haber causado su falta de aliento, me gusta considerar cuatro categorías generales: un problema pulmonar, un problema cardíaco, anemia (bajo recuento de glóbulos rojos), y el desacondicionamiento.
Dado que sólo estuviste enfermo de COVID durante una semana, el desacondicionamiento secundario a una enfermedad tan corta es menos probable, excepto si ya eras más sedentario debido a problemas de salud. Así pues, dejemos de lado esta causa por ahora.
En cuanto a las otras tres categorías, también es importante saber si tiene otros síntomas además de la falta de aire. Por ejemplo, la tos y las sibilancias indicarían un problema pulmonar.
Incluso las personas que nunca han tenido asma pueden desarrollar síntomas similares a los del asma después de una enfermedad respiratoria vírica como el COVID.
La falta de aire debida a un problema cardíaco puede deberse a un corazón débil o rígido, que puede disminuir la capacidad de bombeo del corazón, lo que se conoce como miocardiopatía.
Con la cardiomiopatía, las personas también pueden experimentar hinchazón de tobillos por retención de líquidos y dificultad para respirar cuando están tumbadas.
Además, la mayoría de las personas con enfermedad coronaria -acumulación de placa en las paredes de las arterias que suministran sangre al corazón- experimentan dolor torácico con el esfuerzo, pero a veces la falta de aire es el único síntoma.
Un recuento bajo de glóbulos rojos, especialmente la anemia por falta de hierro, sería menos probable que las otras causas mencionadas. Además de la falta de aliento, otros signos de anemia son la palidez y la debilidad.
Volviendo a COVID como una causa o factor contribuyente, hay una buena probabilidad de que su médico no será capaz de responder específicamente a esa pregunta.
En cualquier caso, si llevas cuatro meses sin poder respirar, sin duda necesitas una evaluación médica que te ayude a determinar el problema subyacente (y cuanto antes mejor).
Es probable que su médico le haga un historial detallado de sus síntomas y le realice un examen físico centrado en el corazón y los pulmones.
Es probable que las pruebas diagnósticas iniciales incluyan el uso de una sonda en el dedo para medir el nivel de oxígeno en sangre, un análisis de sangre para comprobar si hay anemia e imágenes torácicas con una radiografía de tórax o una tomografía computarizada.
Otras pruebas pueden ser un ecocardiograma, que utiliza ondas sonoras para evaluar la función cardiaca, y una evaluación de la respiración (pruebas de función pulmonar).
La buena noticia es que usted y su médico pueden formular un plan de tratamiento para ayudar a mejorar sus síntomas, aunque no descubran la razón específica de la falta de aire.