Estas píldoras supuestamente ayudan a prevenir y controlar los síntomas del agrandamiento de la próstata (hiperplasia prostática benigna o HPB).
Se dice que algunos de sus ingredientes protegen contra el cáncer de próstata o ralentizan su crecimiento. Pero, ¿hay algo de cierto en estas afirmaciones?
“Las investigaciones han explorado el papel de los suplementos en la salud de la próstata sugiriendo resultados positivos”, dice el Dr. Quoc-Dien Trinh, cirujano urológico del Brigham and Women’s Hospital, afiliado a Harvard.
“Pero los hallazgos suelen ser observacionales, mostrando sólo una asociación, y están lejos de ser concluyentes”.
El panorama general
La categoría general de suplementos dietéticos incluye vitaminas individuales, como la A, B, C, D y E, y minerales como el calcio. También hay multivitaminas y fórmulas especializadas que contienen diversas combinaciones de vitaminas y minerales.
Muchos suplementos para la próstata contienen varios ingredientes que se cree que favorecen la salud de la próstata. Los más comunes son la palma enana americana, el selenio, el zinc y el beta-sitosterol.
Hasta ahora, las investigaciones de apoyo son alentadoras, pero aún no está claro si es útil mezclar estos ingredientes y otros en una píldora única. Esto es lo que la ciencia ha revelado.
Saw Palmetto (La palma enana americana). La palma enana americana es un arbusto que crece en el sureste de Estados Unidos.
Un extracto de su fruto puede ayudar a combatir los síntomas de la HBP, como la necesidad constante de orinar o un chorro de orina débil.
Los estudios son contradictorios: dos grandes estudios de alta calidad financiados por los Institutos Nacionales de la Salud descubrieron que la palma enana americana no era más eficaz que un placebo. Pero otros estudios han sugerido que estos suplementos podrían tener beneficios modestos.
Selenio. Algunos estudios han sugerido que el mineral selenio podría desempeñar un papel en la protección contra el cáncer de próstata y en la ralentización de su progresión, pero otros estudios no han encontrado ningún beneficio.
Por lo tanto, aún no se ha determinado qué hombres podrían beneficiarse de la administración de suplementos de selenio ni cuál podría ser la dosis adecuada.
Zinc. Las células de la próstata acumulan más zinc que las de cualquier otro tejido humano, y este mineral desempeña un papel en el funcionamiento normal de la próstata.
Algunas investigaciones científicas básicas sugieren que la carencia de zinc puede aumentar el riesgo de agrandamiento y cáncer de próstata. Sin embargo, los estudios observacionales que analizan los suplementos de zinc no muestran mejoras consistentes en la salud de la próstata.
De hecho, tomar dosis elevadas de zinc (100 miligramos diarios) podría aumentar el riesgo de cáncer de próstata.
Beta-sitosterol. El beta-sitosterol, un tipo de sustancia química denominada esterol vegetal, se encuentra en frutas, verduras, frutos secos y semillas. Aunque puede reducir los niveles de colesterol, también se cree que reduce la inflamación de la próstata y mejora los síntomas de la HBP.
Sin embargo, no reduce el tamaño de la próstata. Un estudio doble ciego publicado en línea el 3 de julio de 2020 por BMC Urology descubrió que los hombres que tomaron aceite de saw palmetto enriquecido con beta-sitosterol diariamente durante 12 semanas mejoraron los síntomas de la HBP, incluido el flujo de orina.
¿Qué contienen exactamente los suplementos?
El mayor problema con los suplementos para la próstata es el mismo que con otros suplementos dietéticos de venta libre: la FDA los regula como una subcategoría de alimentos.
Esto significa que la FDA controla los productos que hacen afirmaciones engañosas, pero no revisa los suplementos en cuanto a su seguridad o eficacia.
“Así que no siempre se puede estar seguro de cómo se fabrica un suplemento o de si contiene lo que pone en la etiqueta”, dice el Dr. Quoc-Dien Trinh, cirujano urológico del Brigham and Women’s Hospital de Harvard.
Otro problema es que la cantidad y la combinación de los posibles ingredientes que favorecen la próstata varían según el producto. “Como no hay consenso sobre la cantidad, si es que hay alguna, que sea suficiente, es imposible decir si un suplemento para la próstata puede ofrecer lo que se necesita”, dice el Dr. Trinh.
La dieta por encima de las pastillas…?
Sea cual sea el papel de las vitaminas y los minerales para mantener la salud de la próstata, en lugar de recurrir a los suplementos, el Dr. Trinh sugiere seguir un patrón de alimentación basado en plantas, como la dieta mediterránea o la dieta DASH.
Estas dietas hacen hincapié en grandes cantidades de frutas y verduras enteras (especialmente las crucíferas), cereales integrales, frutos secos y aceite de oliva, y prefieren el pescado a la carne roja.
Las investigaciones demuestran sistemáticamente que las dietas basadas en plantas ayudan a reducir los niveles de colesterol, la presión arterial y el peso, lo que ayuda a proteger contra las enfermedades del corazón.
“Y lo que es bueno para el corazón tiende a ser bueno para todo el cuerpo, incluida la próstata”, dice el Dr. Trinh.