¿Por qué se está debilitando el cabello?
La caída del cabello relacionada con la edad se debe a dos afecciones comunes.
La más común es la alopecia androgenética, también llamada caída del cabello de patrón masculino o femenino. El primer signo es el debilitamiento del cabello. “Los folículos pilosos se vuelven más pequeños, lo que hace que las hebras sean más finas.
Algunos folículos dejan de producir pelo por completo”, explica la Dra. Kathie Huang, codirectora de la Clínica de Caída del Cabello del Hospital Brigham and Women’s, afiliado a Harvard, y profesora adjunta de Dermatología de la Facultad de Medicina de Harvard.
Este tipo de caída del cabello puede deberse a cambios genéticos u hormonales relacionados con la edad. Se produce gradualmente, con pautas específicas para hombres y mujeres. “En los hombres, la línea frontal del cabello tiende a retroceder, o pueden tener adelgazamiento en las sienes o en la coronilla.
En las mujeres, puede afectar a la mayor parte del cuero cabelludo o a determinadas zonas, como la parte media, las sienes y la zona frontal del cuero cabelludo”, explica el Dr. Huang. “Pero en la alopecia androgenética, las mujeres no desarrollan calvicie como pueden hacerlo los hombres”.
Otro tipo común de caída del cabello es el llamado efluvio telógeno. Este tipo de adelgazamiento se produce de repente, a menudo como reacción al estrés emocional o físico.
“Puede ocurrir después de haber tenido fiebre alta, una infección urinaria o una intervención quirúrgica. También puede producirse como reacción a una enfermedad subyacente o a la toma de un nuevo medicamento”, explica el Dr. Huang.
Dónde acudir para obtener ayuda contra la caída del cabello
Su médico de cabecera puede evaluar si la caída del cabello está causada por una enfermedad subyacente, la medicación, los cambios hormonales o el envejecimiento.
El médico puede pedirle análisis de sangre o recetarle tratamientos. Si desea acudir a un especialista, visite a un dermatólogo colegiado especializado en el tratamiento de la caída del cabello y que conozca bien las muchas opciones disponibles para ayudar a que vuelva a crecer el pelo.
Proteger el cabello
El tipo de tratamiento que le recete su médico dependerá de la causa de la caída del cabello. El efluvio telógeno se corrige por sí solo o una vez tratada la causa subyacente. “El efluvio telógeno suele mejorar en tres a seis meses”, dice el Dr. Huang.
Para las personas con alopecia androgenética, el tratamiento tiene como objetivo mejorar los folículos pilosos, de modo que los mechones de pelo se vuelvan más gruesos y el cabello parezca más denso en general. Los siguientes tratamientos pueden ayudar.
Fármacos tópicos. La FDA ha aprobado el minoxidil (Rogaine), de venta libre, como tratamiento contra la caída del cabello tanto en hombres como en mujeres. Ayuda a engrosar los folículos pilosos y favorece el alargamiento del cabello.
Se presenta en forma de líquido o espuma que se aplica en el cuero cabelludo. “Si se tiene mucho pelo, puede resultar más fácil aplicar la forma líquida. Pero el líquido irrita más que la espuma”, dice el Dr. Huang. “Y hay que usarlo a diario durante al menos nueve meses para ver mejoría”.
Medicamentos orales. Estudios recientes sugieren que tomar minoxidil en forma de píldora, que se utiliza desde hace décadas para tratar la hipertensión, es seguro y eficaz para tratar la caída del cabello.
“Hemos visto un aumento en el uso de minoxidil oral para la pérdida de cabello en el último año”, dice el Dr. Huang.
“Es útil para las personas que no obtienen suficientes beneficios con el minoxidil tópico, o para las que sufren irritación del cuero cabelludo con la forma tópica”.
Otros medicamentos orales para tratar la caída del cabello son la finasterida (Propecia, Proscar) y la espironolactona (Aldactone). “Los medicamentos orales pueden tener efectos secundarios. Por ejemplo, el minoxidil oral puede causar hipotensión o palpitaciones. Por lo tanto, adaptamos cuidadosamente el régimen de tratamiento a cada paciente”, dice el Dr. Huang.
Inyecciones de plasma rico en plaquetas. En este procedimiento se inyectan en el cuero cabelludo altas concentraciones de componentes de la propia sangre para estimular el crecimiento del cabello. Según el Dr. Huang, cada tratamiento puede costar entre 500 y 1.500 dólares.
Normalmente se repite el proceso mensualmente, durante tres meses, y se requieren tratamientos de seguimiento cada año. Aún no se ha demostrado la eficacia del plasma rico en plaquetas para el crecimiento del cabello.
Tratamientos con luz láser. Los aparatos que emiten luz láser LED de baja intensidad podrían favorecer el crecimiento del vello. Están disponibles (sin receta) en peines y cascos que se usan regularmente en casa. Los precios oscilan entre unos cientos y unos miles de dólares.
Suplementos. Los suplementos son a veces caros, y no hay pruebas sólidas de que hagan crecer el pelo. “Pero si no interfieren con la medicación, probablemente no haya problema en probarlos”, dice el Dr. Huang.
Y para cualquiera de estos tratamientos, la clave está en iniciarlos en cuanto se detecte la caída del cabello. Una vez que los folículos dejan de funcionar, la única opción para recuperar el cabello es la cirugía de trasplante capilar.