Harvard Medical School
He aquí cómo actúan los distintos medicamentos.
Desde la década de 1990, los fármacos para la disfunción eréctil (DE) han ayudado a millones de hombres a seguir disfrutando de una vida sexual activa.
«Aunque no ha cambiado mucho su funcionamiento ni los tipos de fármacos disponibles, hay aspectos que los hombres deben tener en cuenta a la hora de elegir uno», afirma el Dr. Michael O’Leary, urólogo y ex director de salud masculina del Departamento de Urología del Hospital Brigham and Women’s, afiliado a Harvard.
Los cuatro grandes
La FDA ha aprobado cuatro medicamentos principales para la disfunción eréctil: sildenafilo (Viagra), tadalafilo (Cialis), vardenafilo y avanafilo (Stendra).
Todos ellos se presentan en forma de comprimidos; el vardenafilo también se fabrica en una versión disoluble que se coloca bajo la lengua. Existen medicamentos masticables para la disfunción eréctil que contienen los mismos principios activos que el sildenafilo, el tadalafilo y el vardenafilo.
Sin embargo, se fabrican por encargo en farmacias especializadas y pueden incluir otros ingredientes. El Dr. O’Leary desaconseja el uso de estos productos a medida, ya que no están regulados ni aprobados por la FDA.
Los cuatro fármacos para la disfunción eréctil –conocidos médicamente como inhibidores de la PDE5- actúan de forma similar para aumentar el flujo sanguíneo en el pene, lo que ayuda a los hombres a alcanzar y mantener una erección. Para ello, inhiben la fosfodiesterasa tipo 5 (PDE5), una enzima de las paredes de los vasos sanguíneos que controla el flujo sanguíneo.
Cuando un hombre se excita, su cuerpo libera moléculas que relajan los músculos lisos de los vasos sanguíneos, permitiendo que fluya más sangre. Los fármacos para la disfunción eréctil impiden que la PDE5 descomponga estas sustancias, manteniendo así el flujo sanguíneo.
Según el Dr. O’Leary, los fármacos para la disfunción eréctil son eficaces en el 70% de los hombres, pero los resultados pueden variar. «Un hombre con nervios o arterias dañados por una operación de próstata, diabetes o enfermedad cardiovascular no responderá tan bien a los fármacos para la disfunción eréctil», afirma.
Además, aunque los fármacos para la disfunción eréctil pueden ayudar a los hombres a conseguir y mantener una erección, no ayudan con otros problemas sexuales, como la libido baja, la eyaculación precoz o la incapacidad para alcanzar el orgasmo.
Elección del fármaco para la disfunción eréctil
Las principales diferencias entre los fármacos para la disfunción eréctil son la rapidez con la que actúan y la duración de su efecto.
He aquí un desglose:
- El avanafilo tarda entre 15 y 30 minutos en hacer efecto y dura entre 6 y 12 horas.
- El sildenafilo y el vardenafilo hacen efecto entre 30 minutos y una hora y duran entre cuatro y cinco horas.
- El tadalafilo actúa entre 30 y 45 minutos después y puede durar entre 24 y 36 horas.
¿Qué fármaco le conviene?
«Muchos médicos recetan primero sildenafilo porque es el que lleva más tiempo en el mercado y tiene un alto porcentaje de éxito», dice el Dr. O’Leary.
Los hombres que deseen un efecto más duradero pueden optar por el tadalafilo.
El tadalafilo también está disponible como fármaco diario de dosis baja, de modo que se mantiene una cantidad constante del medicamento en el torrente sanguíneo, lo que ayuda a mantener relaciones sexuales espontáneas. (Esta versión también se utiliza para tratar la hiperplasia prostática benigna, o agrandamiento de la próstata).
Las dosis máximas de los fármacos para la disfunción eréctil varían entre los 20 miligramos (mg) de tadalafilo y vardenafilo, los 100 mg de sildenafilo y los 200 mg de avanafilo. El médico suele empezar con una dosis baja y aumentarla según sea necesario.
«Cuando se alcanza la dosis máxima y el fármaco sigue sin funcionar, tomar más no ayuda», dice el Dr. O’Leary. «Además, cambiar a otro medicamento para la disfunción eréctil no suele suponer ninguna diferencia».
Encontrar el precio adecuado
Los medicamentos recetados para la disfunción eréctil pueden ser caros y no siempre están cubiertos por el seguro médico. Afortunadamente, existen versiones genéricas de sildenafilo, vardenafilo y tadalafilo, que cuestan la mitad o incluso menos que los productos de marca. (El avanafil genérico aún no está disponible en Estados Unidos).
Para encontrar los medicamentos para la disfunción eréctil más baratos, compare precios, ya que pueden variar de una farmacia a otra. El sitio web GoodRx compara los precios de farmacias de renombre.
Posibles efectos secundarios
Los efectos secundarios más frecuentes de los medicamentos para la disfunción eréctil son dolores de cabeza, malestar estomacal, congestión nasal, dolor muscular y rubor facial. Pero la mayoría son relativamente leves y desaparecen al cabo de unas horas.
«Los fármacos para la disfunción eréctil pueden provocar un descenso temporal de la tensión arterial, por lo que no debe tomarlos si toma nitratos para la angina de pecho u otros problemas cardiacos», dice el Dr. O’Leary. Sin embargo, no hay ningún problema con los nitratos que se encuentran en los alimentos, por ejemplo, las verduras de hoja verde (espinacas, col rizada) y las hortalizas de raíz (remolachas, zanahorias).
También hay que tener cuidado si se toman alfabloqueantes como la tamsulosina (Flomax) y la alfuzosina (Uroxatral), utilizados para tratar el agrandamiento de la próstata. «Asegúrese de tomar estos medicamentos con al menos cuatro horas de diferencia de un fármaco para la disfunción eréctil», dice el Dr. O’Leary.
También es mejor no tomar sildenafilo o vardenafilo poco después de comer, ya que los alimentos pueden bloquear su absorción. (El tadalafilo y el avanafilo no interactúan de esta manera con los alimentos).
