Harvard Medical School
Servir un dip con un aperitivo salado nos lleva a consumir muchas más calorías y, además, a comer más rápido, según un estudio publicado en el número de noviembre de 2024 de Food Quality and Preference.
En el análisis participaron 46 adultos (con una media de edad de 39 años y un 74% de mujeres) a los que se sirvieron unas 2,5 raciones de patatas fritas con sabor a rancho con o sin un tercio de taza de salsa ranchera en cada una de las dos visitas a un laboratorio de investigación.
Los participantes podían comer todo lo que quisieran. Los investigadores midieron su ingesta y registraron el número de bocados y el tiempo que comían.
Comer patatas fritas y salsa juntos hizo que los participantes consumieran un 77% más de calorías que comer sólo patatas fritas, además de comer más rápido. De media, los participantes consumieron 345 calorías de patatas fritas con salsa frente a 195 calorías de patatas fritas solas.
Cabe destacar que no se comían menos patatas fritas con salsa, sino la misma cantidad de patatas más la salsa.
Los autores del estudio afirman que, dado que los aperitivos aportan aproximadamente una cuarta parte de las calorías que consume la gente, estos resultados pueden ayudarnos a picar de forma más inteligente: omitir la salsa o limitar el consumo de patatas fritas.
