Los investigadores analizaron la información sobre la salud y la actividad de más de 78.000 personas sanas (de entre 40 y 79 años) que llevaban rastreadores de fitness las 24 horas del día, durante al menos tres días, y a las que se siguió durante siete años.
En comparación con las personas que no caminaban mucho, las que caminaban unos 9.800 pasos al día (unos ocho kilómetros) tenían un 51% menos de probabilidades de desarrollar demencia.
Las personas que caminaban sólo 3.800 pasos al día (unos tres kilómetros) tenían un 25% menos de probabilidades de desarrollar demencia.
El estudio era de observación, por lo que no puede aportar pruebas concluyentes de que caminar en sí mismo marque la diferencia.
Pero no estaría de más que intentara incluir unos cuantos pasos más en su rutina diaria. Cuantos más pasos dé, mejor será para su salud: para su cerebro, su corazón y su protección contra el cáncer, entre otros beneficios.