Es posible que no quieran lidiar con la molestia de las recetas, los costos, los posibles efectos secundarios (como la disfunción sexual) o la preocupación de que el tratamiento con medicamentos pueda significar un compromiso sin fin.
Pero, ¿qué pasa con los suplementos de venta libre? ¿Son una opción segura para aliviar los síntomas de depresión?
“Los suplementos generalmente no son de alto riesgo, pero cualquiera que los pruebe debe adoptar un enfoque cuidadoso”, dice el Dr. Michael Craig Miller, profesor asistente de psiquiatría en la Facultad de Medicina de Harvard.
Suplementos para aliviar la depresión.
Algunos suplementos se usan comúnmente para ayudar a aliviar los síntomas de la depresión.
Cualquiera de los siguientes puede proporcionar algún alivio:
Aceite de pescado. El pescado azul como el salmón y las sardinas son abundantes en ácidos grasos omega-3.
“Los ácidos grasos Omega-3 son un componente básico de las membranas de las células nerviosas. Son esenciales para la función saludable del sistema nervioso y pueden combatir la inflamación”, dice el Dr. Miller. Si no cree que está recibiendo suficiente en su dieta, puede complementar su ingesta con una píldora de aceite de pescado.
Metilfolato: El metilfolato, una forma del ácido fólico de la vitamina B, ayuda a descomponer el aminoácido homocisteína. Los niveles altos de homocisteína en la sangre están asociados con la depresión (así como con demencia, enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular). Las deficiencias de folato también están asociadas con la depresión en algunos estudios.
N-acetilcisteína. Esta sustancia es un precursor del antioxidante glutatión (que neutraliza las moléculas inestables y potencialmente tóxicas en el cuerpo). Puede ayudar a combatir la inflamación y promover la señalización saludable de las células nerviosas.
S-adenosilmetionina (SAMe). Este compuesto también se produce naturalmente en el cuerpo. “Está involucrado en la síntesis de hormonas y neurotransmisores, los químicos que envían mensajes de nervio a nervio”, explica el Dr. Miller.
Hierba de San Juan. Esta hierba proviene de una flor (Hypericum perforatum) y se ha utilizado para tratar la depresión durante siglos en Europa.
“Se cree que la hierba de San Juan es un promotor de la serotonina, por lo que generalmente no debe combinarse con antidepresivos específicos de la serotonina”, como los ISRS, dice el Dr. Miller.
Vitamina D. El cerebro tiene receptores para la vitamina D en áreas involucradas en la depresión, como la corteza prefrontal.
“Se cree que la vitamina D está involucrada en la producción saludable de neurotransmisores”, dice el Dr. Miller. La falta de vitamina D está asociada con la depresión.
No es tan simple
Si bien es fácil ir a la farmacia de la esquina y comprar una botella de suplementos, es difícil saber si las píldoras realmente funcionarán.
Parte del problema es que la FDA no regula la fabricación de suplementos de venta libre como lo hace para los medicamentos recetados, por lo que los fabricantes no tienen que demostrar que los suplementos son efectivos o decirle de qué están hechas realmente las píldoras (a pesar de las listas de ingredientes en las etiquetas).
La otra parte del problema es que no tenemos mucha evidencia sobre algunos suplementos. Eso significa que es posible que no conozcamos los efectos secundarios y que no haya datos firmes que indiquen que los suplementos reducen los síntomas de depresión. La investigación es demasiado limitada, y los estudios existentes han producido resultados mixtos.
Pero algunos hallazgos alentadores sugieren que ciertos suplementos de venta libre pueden mejorar los síntomas de la depresión. Por ejemplo:
• Una revisión de 40 estudios de 2016, publicada el 1 de junio de 2016, en The American Journal of Psychiatry, encontró evidencia para apoyar el uso de SAMe, metilfolato, omega-3 y vitamina D para reducir los síntomas de depresión.
• Una revisión de cinco ensayos aleatorios publicados en abril de 2016 en The Journal of Clinical Psychiatry sugirió que la N-acetilcisteína fue bien tolerada y alivió los síntomas de depresión.
Otras formas de combatir la depresión:
Por lo general, se necesitan más que pastillas para controlar los síntomas de la depresión. “Hay muchas cosas que las personas necesitan para mantener su bienestar”, dice el Dr. Michael Craig Miller, profesor asistente de psiquiatría en la Facultad de Medicina de Harvard.
“Vivir una vida sana y significativa requiere algo más que modificar su biología con un medicamento recetado o un suplemento nutricional”.
Aquí hay algunos enfoques que han demostrado ayudar a aliviar los síntomas de depresión.
Ejercicio. Hacer bombear el corazón y los pulmones ayuda a aumentar el flujo sanguíneo al cerebro y alienta al cerebro a producir factores de crecimiento nervioso natural Ambos efectos hacen que los nervios sean más saludables. Para algunas personas, el ejercicio es suficiente para tratar la depresión leve. Pruebe una caminata diaria (30 minutos a un ritmo rápido) para mejorar su estado de ánimo y energía.
Dieta. Comer saludablemente se asocia con un mejor estado de ánimo y un menor riesgo de depresión. Deje la comida chatarra y otros alimentos procesados y concéntrese en la proteína animal magra (como el pescado o las aves de corral), frutas y verduras, nueces, legumbres (guisantes y frijoles) y semillas.
Meditación de atención plena. Muchos estudios han relacionado la meditación de atención plena con un mejor estado de ánimo y una menor ansiedad y depresión. Puedes hacerlo casi en cualquier lugar y en cualquier momento. Simplemente siéntate cómodamente, concéntrate en tu respiración y dirige tu atención al presente. Cuanto más tiempo puedas practicar ser consciente durante todo el día, mejor serás.
Que deberías hacer
El Dr. Miller aconseja informar a su médico que le gustaría probar un suplemento para tratar su depresión. Juntos, pueden sopesar las opciones para su situación particular y evitar combinaciones de medicamentos inseguras. “Por ejemplo”, advierte el Dr. Miller, “se ha demostrado que la hierba de San Juan reduce la efectividad de muchos medicamentos, y los suplementos de omega-3 pueden aumentar el riesgo de sangrado en personas que toman anticoagulantes”.
Si decides que quieres probar un suplemento para combatir los síntomas de depresión, asegúrate de seguir su uso.
“Mantenga un registro de lo que está tomando y tome nota de sus síntomas. Espere un mes o dos para ver si es útil, luego vuelva a evaluar cómo se siente”, dice el Dr. Miller. “Si no se siente mejor, revise las alternativas con su médico”.
