Harvard Medical School
Un estudio de Harvard sugiere que aumentar la proporción de proteínas de origen vegetal en la dieta está relacionado con un riesgo significativamente menor de sufrir problemas de corazón y vasos sanguíneos.
Los resultados se publicaron en el número de diciembre de 2024 de la revista The American Journal of Clinical Nutrition. Los investigadores evaluaron la información sobre salud y estilo de vida comunicada por más de 200.000 personas a las que se hizo un seguimiento durante 30 años.
En comparación con los participantes cuyas dietas tenían la proporción más baja de proteína vegetal y proteína animal, aquellos con la proporción más alta tenían un riesgo 19% menor de desarrollar enfermedad cardiovascular y un riesgo 27% menor de desarrollar enfermedad de las arterias coronarias.
Las personas que sustituyeron la carne roja y procesada por fuentes vegetales también tenían menos riesgo de sufrir accidentes cerebrovasculares.
Los resultados del estudio no dicen que haya que eliminar las proteínas animales, sino que su proporción debe reducirse en la mayoría de las personas. Las fuentes de proteínas vegetales son las legumbres (como las alubias y las lentejas), los frutos secos, las semillas y los cereales integrales.